Todo gran cultivo de maíz empieza por una buena semilla. Conoce las características de las que ofrecen plántulas vigorosas y altos niveles de rendimiento.
#AgriculturaSi no eliges las semillas de maíz adecuadas, de nada te servirá seguir al pie de la letra las mejores recomendaciones de fertilización y labranza. La cosecha de tu cultivo no será la mejor y, es posible, que te vayas en pérdidas al final de la comercialización del grano.
En ese sentido, al elegirlas debes evaluar estas cinco características importantes para que no comprometas la productividad de tu cultivo:
Un porcentaje de germinación superior al 95% y vigor de 85% se consideran apropiados. Asegúrate de que no sea inferior a este índice, lo que muchas veces está relacionado con la edad de la semilla. De hecho, si es posible, practícales alguna de las pruebas de germinación de semillas de granos básicos, cuyo resultado es bastante cercano a la realidad. Las semillas Mazpar son un ejemplo de eso: semillas nuevas y alto porcentaje de germinación y vigor.
Las cifras indican que la superficie de producción de maíz en Paraguay alcanzó las 960.000 hectáreas en 2016, distribuidas principalmente en los departamentos de Alto Paraná, Canindeyú, San Pedro y Caaguazú. Y, como es sabido, las semillas no arrojan el mismo rendimiento y nivel de germinación en todos los climas y áreas geográficas.
Por ello, al seleccionarlas debes asegurarte que las clasificaciones de madurez y grado de crecimiento (GDD) -así como los niveles de humedad y adaptación- correspondan a las variaciones climáticas del área en la que se encuentra tu cultivo.
Además de daños como rotura de ramas y vuelco de las plantas -entre otros-, los vientos fuertes generan varios problemas en un cultivo de maíz:
Por lo tanto, elige para tu cultivo semillas de maíz con alta resistencia al viento y/o enfermedades derivadas de las problemáticas enunciadas anteriormente, especialmente si tu cultivo se ubica en zonas donde los vientos sean fuertes y constantes.
Cabe señalar que eso no te exime de trazar los surcos en sentido perpendicular a la dirección de los vientos dominantes y, de ser necesario, establecer una barrera de protección alrededor del cultivo (por ejemplo, una cerca de árboles).
Para nadie es un secreto que la calidad del grano maíz difícilmente será mejor que la que presente la semilla. Por eso, además de asegurarte de que los empaques no estén deteriorados y las etiquetas de certificación no presenten anomalías, verifica que la semilla sea del tamaño y forma elegida y que no tenga daños de hongos, insectos o roedores.
Teniendo en cuenta que las condiciones climáticas son impredecibles, lo más recomendable para seleccionar semillas de alta calidad es considerar su rendimiento durante los dos últimos años en varias ubicaciones y condiciones climáticas, pero como eso es un procedimiento bastante complicado a causa de la poca información al respecto, debes atender a los datos aportados por el proveedor.
En todo caso, recuerda que el rendimiento medio de los cultivos de maíz en Paraguay se encuentra en 4.500 kilos de grano por hectárea (con una variación +/- 5%), En algunas regiones con alto nivel de inversión los híbridos Mazpar han alcanzado 10.000 Kg/ha.
Finalmente, ten presente que -pese a que las semillas determinan en gran medida el rendimiento y calidad del producto final- debes cuidar tu cultivo de todas las amenazas ambientales que lo pudieran afectar.
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